Trix es el apodo de un esqueleto de T. rex descubierto en Montana, Estados Unidos, en la Formación Hell Creek. El descubrimiento y la excavación para recuperar los huesos fósiles tuvieron lugar en el año 2013 por un equipo de paleontólogos del Museo de Historia Natural de Leiden, en los Países Bajos. El esqueleto está excepcionalmente bien conservado, lo que ha permitido a los científicos obtener una valiosa información sobre la anatomía y el comportamiento de esta especie.
A Trix, este fósil excepcional de tiranosaurio Rex, le llaman la Gioconda del Naturalis
Donde está el fósil del tiranosaurio Rex Trix
El esqueleto fósil del tiranosaurio Trix lo podemos ver en el Naturalis Museum en la ciudad de Leiden (en Holanda Meridional en Los Países Bajos) a medio camino entre Amsterdam y La Haya:
Curiosidades de Trix, el tiranosaurio Rex
Se cree que podía correr a unos 20km por hora. Y desplazarse a unos 5km andando.
El esqueleto muestra marcas de lucha, y algunos agujeros en los huesos podrían ser debidos a mordeduras realizadas por otros tiranosaurios. Además presenta signos de infección en los huesos de la mandíbula.
La edad del fósil de Trix se estima en aproximadamente unos 67 millones de años (Cretácico Superior). Esto sitúa al tiranosaurio rex Trix en un momento cercano al final de la era de los dinosaurios.
Trix es el tercer ejemplar de tiranosaurio rex más completo encontrado. Y con una estimación basada en la estructura y el tamaño de sus huesos, se cree que tenía entre 30 y 33 años en el momento de su muerte, por lo que es el espécimen de T. rex de más edad encontrado.
Para exibir el esqueleto fósil había que completar el esqueleto, que aunque es uno de los más completos del mundo no tenía todos los huesos. Por eso, como suele ser habitual en estos casos, se utilizaron réplicas en 3d de las partes no encontradas. Esas réplicas son de los huesos del conocido tiranosaurio rex llamado Sue exibido en el museo de historia natural de Chicago que tantas veces vimos en las películas.
La postura en la que se exibe a Trix en el museo de Leiden no es la habitual a la hora de exponer los restos fósiles de un tiranosaurio, pero se escogió esta postura por una razón de peso: esta postura permite utilizar el cráneo original del tiranosaurio. Estos cráneos fósiles suelen pesar mucho, lo que hace poco aconsejable utilizar los originales en posturas más erguidas. Nos parece un acierto, ya que además de poder ver los huesos originales también podemos «disfrutar» una vista frente a frente, imaginándonos mirando a los ojos a este magnífico animal extinto hace millones de años.
Como muestra un leve sonrisa que podemos apreciar gracias a la postura en la que se encuentra se la ha llegado a llamar la Monalisa del Naturalis.
